Bi-Ocupacional?

La misión a través de Obreros Bi-Ocupacionales no es la estrategia particular desarrollada por una iglesia que lucha por avanzar en medio de los desafíos de este siglo. Dentro de quienes sirvieron al Señor a través de su profesión o que tuvieron una ocupación para proveer su sustento se encuentran los personajes Bíblicos de José, Daniel, Nehemías y Pablo entre otros, mientras que la historia de las misiones modernas menciona a Guillermo Carey (1761-1834) como uno de los tantos ejemplos.

Sin embargo, los obstáculos en la práctica de la misión de antaño parecen ser los mismos que en nuestro tiempo. Entre los desafíos que estos últimos siglos han traído consigo, encontramos países que no sólo han cerrado sus puertas al evangelio sino que prohíben y penalizan la conversión al Cristianismo.


Se dice que hay más mártires de la fe en el siglo XX, que en la suma de todos quienes dieron su vida en los primeros XIX siglos.

Esto, así como también el fenómeno de la globalización y la constante limitación de recursos destinados a la misión, son algunos de los factores que impulsan hoy el fuerte mover de obreros bi-ocupacionales como testigos del evangelio al mundo.

El cambio en el pensamiento y práctica misionologica también forman parte de este impulso. El crecimiento de la Iglesia en varios sectores del mundo como Asia, África y América Latina ha dado paso a un movimiento misionero “desde el Sur”, que ha sido grandemente influenciado por el concepto de “Pueblos No Alcanzados” (PNA). Se ha cambiado el termino “país” para pasar al de “etnia” o “nación”, según el concepto bíblico . Esto ha significado un profundo cambio en la distribución de los recursos y envío misionero. Las Iglesias y organismos enviadores han sido desafiados a concentrar sus esfuerzos en determinados sectores del mundo donde se encuentran los menos alcanzados con el evangelio, zona que coincide con la ubicación de los “Países de Acceso Restringido”, o según otra acepción “Países de acceso Creativo”.
En estos países el envío de obreros bi-ocupacionales no es una opción sino una necesidad.

En nuestro contexto latino la Confraternidad Latinoamericana Aliancista (CLA), a través de su naciente agencia misionera, ha definido algunos requisitos para obreros Bi-Ocupacionales según acuerdos tomados por la comisión que fue nombrada en CLA Paraguay (2005), y que se reunió en Guayaquil entre el 17 y 19 de Mayo de 2006.
Estos requisitos incluyen el buen testimonio dentro y fuera del hogar y la iglesia, madurez espiritual, doctrina sana, conocimiento de las Escrituras, convicción de llamado, adaptabilidad, tener un trabajo secular y/o profesión y estar libre de deudas antes de salir al campo, entre otras cosas.



Como DNM Chile hemos incluido la categoría de “Bi-Ocupacionales” dentro de las áreas ministeriales de envío misionero, fin para el cual hemos adoptado la siguiente definición:

“Obreros Bi-Ocupacionales son testigos cristianos quienes a través de sus ocupaciones logran acceso y permanencia en otra cultura, específicamente a países de acceso restringido, con la intención de hacer discípulos de Jesucristo y donde sea necesario plantar y/o establecer iglesias”.

Aquí es importante destacar que el ministerio de un obrero bi-ocupacional se desarrolla principalmente dentro de su tiempo y área de trabajo por lo cual es de suma importancia que la persona se sienta a gusto y tenga experiencia en su ocupación. Hoy en día se ha descartado la idea de ocupaciones en las que el obrero no tiene mayor interés y/o experiencia, las cuales utiliza sólo como medio ingreso a un determinado país. La experiencia dice que generalmente terminan encontrándose fracasados profesionalmente y frustrados ministerialmente.

Las áreas de servicio bi-ocupacional son múltiples. Dentro del DNM evitaremos el uso de la palabra “profesionales” ya que la consideramos limitante para este tipo de ministerio. Cuando decimos obreros Bi-Ocupacionales nos referimos más bien a alguien que tiene dos ocupaciones. La primera ocupación de todo obrero debe ser su Señor Jesús, como centro de la misión. La segunda, es su ocupación, especialidad, profesión, etc puesta al servicio de Dios y la extensión del Reino. No buscamos profesionales cristianos sino cristianos que este dispuestos a servir con su ocupación.

Como mencionamos anteriormente el lugar de trabajo es el campo de misión por lo que se debe estar preparado para vivir la fe en un medio totalmente adverso siendo ejemplo de consagración y vida cristiana. También debe saber dar razón de la fe frente a creencias orientales, filosóficas, tribales y/o seculares; y estar preparado para guiar a otros a Cristo, discipular nuevos creyentes, plantar iglesias y formar siervos nacionales que continúen la labor.

Como DNM Chile estamos comenzando a desarrollar esta área de ministerio en la convicción que Dios, que va adelante nuestro, tiene campos de servicio para quienes quieren disponer sus vidas. Vidas integrales para servicios integrales.